martes, 3 de marzo de 2015

Yo también nací en el 73

Y como tú, rondo los 42, algunos tenemos hijos, grandes amigos, una casa, un casi trabajo, alguien con quien compartir la vida, un corazón podrido de latir (con permiso de Sabina) y un cuerpo empeñado en mostrar su edad.

Hemos mirado al futuro con cierto recelo, tal vez asustados por la supuesta experiencia de los que nos precedieron; y hemos mirado al pasado a veces con alivio, muchas otras con nostalgia. El miedo al futuro tampoco era para tanto, porque lo que tenga que ser será y a veces por mucho que nos empeñemos ese algo jamás sucederá –esto último lo acabo aprender-. 
Somos más de presentes -de aquí  y de ahora- que de futuros inciertos, aunque reconozco que lo miramos de reojo, por si acaso. Quién sabe como amanecerá mañana…
Así que, nos dejamos llevar por los vaivenes o por los meneos que la vida nos regale. A veces nos recuperamos rápido y otras, aún nos duele la pedrada que nos dieron con 8 años.


Somos mujeres defensoras de mujeres, y no por tener hijos -aunque cada vez me siento más poderosa por ser madre- si no porque siempre tenemos algo más que dar. Porque todas las que nos rodean son claros ejemplos de generosidad. Y cuando digo todas, digo todas. Mira a tu alrededor y verás.

Sólo teníamos dos canales de televisión y nos mandaban a la cama si al empezar una peli aparecían dos rombos… No tuvimos ordenadores, ni tablet, ni consolas, pero nos encantaba saltar a la comba, las tabas, las muñecas, los Juegos Reunidos, el rescate, o pasábamos las tardes subidos a un árbol comiendo pipas. Salíamos a la calle con bocadillo en mano, sin miedo a que nos secuestraran o nos atropellaran, y si te caías, la mercromina lo solucionaba todo.
Íbamos de vacaciones 18 en el mismo coche sin cinturones de seguridad ni DVD. Y ninguno tuvimos traumas por ello.

No era para tanto como nos contaron en los colegios de monjas y curas (lo del infierno y el pecado era mentira), ni como nos contaron los de la movida. Aunque de estos últimos aprendimos bastante.
Ese afán por querer ser mayor…

Estoy llorando en mi habitación, todo se nubla a mi alrededor, ella se fue con un niño pijo… 
¡Ay ese niño pijo…!









14 comentarios:

  1. Que post más chulo! Yo también tengo uno nostálgico, aquellos maravillosos años se llama, qué bonita época eh? Un beso!

    ResponderEliminar
  2. Ay ese niño pijo lo que te gustaba jodía!!!! Me parto…
    No soporto a las niñas que todas las canciones les recuadran a algo….

    María

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que se creen que soy drogadicto porque e llevo unos zapatos raros…
      Ay...

      Eliminar
  3. Somos mujeres defensoras de mujeres, y no por tener hijos -aunque cada vez me siento más poderosa por ser madre- si no porque siempre tenemos algo más que dar. Porque todas las que nos rodean son claros ejemplos de generosidad. Y cuando digo todas, digo todas. Mira a tu alrededor y verás.
    He copiado y ahora te pregunto:
    Yo soy hombre y pienso igual, que hacemos?

    Paco Pérez

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A ver Paco Pérez, es genial que pienses igual.
      Que qué haces? Grítalo al mundo!!

      Eliminar
  4. Bueno yo soy de una cosecha un poquito anterior pero que buenos recuerdos tengo de mi infancia y juventud con la comba, la goma, a quemar... Y no te digo nada de los Hombres G... Ahora sigo sin perderme ni uno solo de sus conciertos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo nunca he ido a uno, pero me gustaría…
      Cuantos recuerdos eh?

      Eliminar
  5. Esa reflexión que tan genialmente haces ,se lo digo a mis hijos a diario .Creo que ya los tengo cansados con la cantinela , pero quiero que no olviden ni un momento las posibilidades y oportunidades que tienen y que son afortunados . Yo tuve tv en blanco y negro , no tenía video VHS , me tocó los casettes , y muchos días de dormir obligado por cortes de electricidad casi permanentes,donde la única compañía eran los libros .
    Así que mis vástagos saben que tienen prohibido quejarse .¿De qué?.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sin duda son unos privilegiados, aunque por otro lado, a veces pienso que cuanto más tienen más egoístas se vuelven, y son menos conscientes de ello.
      Gracias!

      Eliminar
  6. Jajajaja, yo no soy del 73 que soy del 71 pero lo mismito, y también le recuerdo a mi hijo que no todo eran bondades antes, que había más autoridad y también más miedo. Y que lo mejor está siempre por venir. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Del 71 lo mismito!
      El miedo es lo peor…
      Otro beso para ti!

      Eliminar
  7. Yo del 76!! :-D Y coincido contigo, han dolido tanto algunas pedradas de la vida que ahora disfrutamos el presente y, el futuro...el futuro ya se verá! ;-)
    PD. Tb fan de Hombres G :-D

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Del 76 casi casi lo mismo, aunque tú eres una jovenzuela!!
      Los Hombres G, son lo más ;)

      Eliminar